domingo, 29 de enero de 2017

La Amazonía, mi despedida de Perú

Faltan 2 horas y media para llegar a los Ángeles. Desafortunadamente mi crónica del viaje va con retraso, pero se ha debido a dificultades técnicas, ya que los ùltimos días en Perú los he pasado en la Selva Amazónica, donde no había luz, mucho menos internet.

En un principio no pensaba ir a la parte amazónica de Perú porque es época de lluvias, pero cuando cambié mi vuelo para quedarme unos días más decidí arriesgarme y sacar un vuelo a Iquitos, la ciudad más grande del mundo sin acceso terrestre y capital de la Amazonía norte peruana.
Cuanto me alegro de esta decidió , ya que si bien casi muero devorada por los mosquitos, pese al bote entero de repelente que me fundí en 3 días, la inmensidad del río Amazonas y sus paisajes no tienen descripción con palabras.

Llegué a Iquitos a las 20:00 horas y tras tener que regatear un mototaxi( eso que en la terminal pone que es precio fijo)fui hacia mi hotel.
Mi primera impresión de Iquitos fue la de una ciudad ruidosa, muy sucia y caótica y por un momento me sentí en Asia por la enorme cantidad de tuk-tuks o moto taxis.



Iquitos at night 





Moto taxis









No acerté nada con el hotel, para una vez que decido dormir en una habitación sola, y el sitio era super ruidoso, sucio y estaba lejos del centro.Así que me puse los tapones y me fui a dormir en horario infantil, como ha venido siendo tónica general en los últimos días, con la firme intención de levantarme pronto para buscar alguna manera de irme a la selva al día siguiente y no pasar un minuto más en Iquitos.
Me desperté a las 6:30 y me dirigí a la calle Pevas, que es donde están todas las compañías que te llevan a la selva. Por 300 soles, negocié la estancia de 3 días y 2 noches en un lodge rústico, con las comidas, el transporte y un guía local que me acompañaría por la selva.
Me dieron la opción de dormir en la selva de camping, pero yo como que paso, que el campo me gusta para un rato…
Una hora en cayuco más tarde y llegué al que sería mi “ todo incluído” los próximos días.




Mi resort de lujo






Mi suite 















No había nadie más, así que he pasado 3 días yo sola con la familia dueña de las cabañas en modo de total desconexión.
Básicamente me he dedicado a pasear por la selva, pescar( bueno intentarlo porque fue muy poco fructífero), bañarme en el amazonas y tratar de ver la fauna y flora local( aunque la fauna debía de estar de vacaciones escolares).






 













Iglesia del pueblo 








































Salvando las distancias, me ha recordado a cuando íbamos a San Blas en Panamá, salvo que cambiando la arena blanca y el azul del mar caribe por las aguas terrosas y marrones del Amazonas. Pero el concepto de chozas de madera, levantarse al amanecer,, acostarse con la puesta bajo un cielo estrellasoy escuchando como  únicos ruidos de fondo,las ranas de la laguna adyacente, el zumbido de los mosquitos( tengo las piernas en carne viva)o las gallinas al despertar.

Muy relajante la experiencia y muy tranquila, además la familia con la que estaba me han tratado en palmitas, aunque se han pasado con la comida, me sentía un lechón en época de engorde, pero por lo que he observado en Perú no se llevan las mujeres flacas( ni de lejos) y comen por 3.








Desayuno de los campeones







este resumen Amazónico, cuyo mejor reflejo son sus fotografías me despido de Perú con una breve reflexión.
Tras pisar nuevamente el continente sudamericano después de haber pasado 3 años desde que me mudé de Colombia, confirmo lo que ya sabía, soy una enamorada de latinoamérica, si bien como viajante ocasional, ya no para vivir allí.
Perú es un país que me ha sorprendido gratamente, ha superado con creces mis expectativas, sus paisajes son espectaculares y su gastronomía de las mejores que he probado.Si bien es cierto que puedo entender por qué el país tiene más Inca Farmas que habitantes: para poder atender la demanda de Almax, porque entre la IncaKola y su dudosa salubridad con ese color radiactivo, y las inmensas cantidades de comida que sirven, Perú tiene que estar a la cabeza mundial en cuanto a úlceras gástricas de refiere.
Pero bromas aparte, yo que soy de muy buen comer, he sido incapaz de acabarme uno solo de los platos que he pedido en las 3 semanas que he estado, y en  resumen Perú cumple  con las 3 b: bueno, bonito y barato.

Así que tras saltarme todas las veces posibles las recomendaciones de vacunación internacional:
No comer en la calle( checked)
No comer frutas y verduras no peladas por mi
Que no te piquen los mosquitos y duerme con mosquitera ( me han devorado)
No bañarse en ríos ( el Amazonas)
Y unas cuantas más…
Me despido recomendándolo y con un  hasta pronto!








sábado, 28 de enero de 2017

Lima


Tras levantarme a las 4:45 me fui a buscar un mototaxi que me llevase a ICA para coger el bus a Lima.
Resulta que Huacachina pese a ser un poco moridero es lugar de peregrinaje fiestero( de colgados que se quedan medio atrapados en el desierto), así que a esas horas había muchos taxis acechando como buitres a los borrachos en la puerta del discotecón de Casa Arena que estaba enfrente de mi hostal.Previo regateo, por 6 soles me dejaron en la estación de autobuses de Perú Bus y a las 6 cogía un bus semicama que en teoría tardaba 4 horas a Lima. No confiaba yo mucho en lo que iba a tardar, porque en principio iba a coger el de las 6:30 que era un vip express pero luego me salieron con que no había y que si me iba a las 6 de la mañana me lo rebajaban a 35 soles( por lo que a mi me pegaba que iba a ir en un tren burra parando en todos los pueblos).
Para mi asombro solo tardo 3 horas y media, y encima había hasta wifi y desayuno( que no me podía comer porque no era gluten free claro).

Una vez en la estación de PerúBus en Lima( no hay estación central y cada compañía llega a su propia terminal), regateo de rigor para el taxi y por 10 soles me lleva a MIraflores que es donde está el ZIG Zag hostel donde me quedo una noche.
El hostel tiene una ONG y los sábados( que es justo cuando llego yo) hacen comida y la reparten entre los niños de los barrios más desfavorecidos de Lima, además para aquellos que participan en el voluntariado( así sea durante un par de horas), ofrecen alojamiento gratuíto. Me sentí muy tentada para ir, pero como solo tenía ese medio día para ver Lima, finalmente y decidí ir al centro histórico.

Desde Miraflores los autobuses 301 y 302 en unos 25 minutos te dejan en el paradero Quilca, que está a 5 minutos caminando dela Plaza San Martín, donde comienza el Centro histórico.



plaza de Armas con el palacio de gobierno al fondo


Tal y como me había dicho todo el mundo, Con un día en Lima es suficiente. El centro histórico es bastante pequeño y son 4 calles alrededor de la plaza de Armas. Además de dicha plaza en la que encontramos la catedral y el Palacio de Gobierno, son de señalar la Iglesia de San Francisco con sus catacumbas y la Iglesia de Santo Domingo, que alberga las cabezas de Santa Rosa y San Martín de 
Porres.






Iglesia de San Francisco






ventilado el turismo cultural decidí hacer turismo gastronómico, que es lo más reseñable en Lima. Pensaba ir a comer ceviche, pero mientras andaba callejeando me topé con un restaurante vegetariano en la Calle Valladolid, y por mucho que reniegue de mi ciudad natal, cuando salgo fuera siempre tiro para la “ patria”, así que como me hizo tanta gracia decidí comer allí. He de decir que estaba bien malo, el saltado de “ lomo” con sucedáneo de tofu como que no está muy logrado.




Haciendo patria 







Calle Valladolid



El calor  de Lima sumado al madrugón me tenían bastante aplatanada así que decidí irme al hostal. En el camino callejee otro poco y la ciudad me recordó bastante a Bogotá, en cuanto sales del casco histórico las calles se vuelven bastante feas y llenas de gente y divididas por negocios, la calle de las ópticas, la de las papelerias, hasta una calle entera dedicada solo a los recordatorios de comunión…
Ya en el hostel me dijeron que había asado ( es decir barbacoa) y que si quería unirme.La verdad, que desde que soy carnivora, por muy empachada que esté soy incapaz de decir que no a un buen chuletón…
Unos chorizos, chuletones y parrafadas después con argentinos,uruguayos, españoles, colombianos, coreanos y nacionalidades varias nos fuimos a dormir.

La mañana siguiente todos de iban a conocer el casco histórico, pero como a las 2 yo me tenía que ir al aeropuerto a coger el avión a Iquitos, decidí quedarme paseando por MIraflores.
Bajé un poco por la avenida Arequipa, que al ser domingo se corta para convertirla en peatonal para que la gente ande en bici y corra, al igual que ocurría en Bogotá.

Tras comer ceviche en un mercado local( y rezar para que no me intoxicase, porque estaba riquísimo pero la salubridad era un poco inexistente) fui a recoger mis cosas y a investigar donde paraba el bus para el aeropuerto.



Ceviche rico, rico


Sabía 
que tenía que coger el 18; uno que pusiese una S o incluso alguno que fuese a Callao. Parecía que nadie tenía ni idea de donde paraba, pero según iba por la avenida xx vi una minivan que ponía “s” y tras preguntar si iba al aeropuerto ahí que me subí .

Nunca me han gustado los taxis, pero en latinoamérica menos, está el factor no taxímetro que implica el consiguiente regateo, (que ya me tiene harta), en algunos sitios el tema de la seguridad…. Y aquí soy muy fan de los buses, son más divertidos, auténticos y encima baratérrimos…. Para ir al 
, 4 soles y eso porque llevaba mochilón y te lo cobran a precio de oro, pero en comparación con los 60 del taxi…. Y encima con musicote y animación.

En 45 minutos estaba en el aeropuerto, o mejor dicho casi, porque el minibus para al lado de un puente elevado, con lo que solo hay que subir y pasar al otro lado para estar dentro de la terminal del aeropuerto, hacer el check in y rumbo a la Amazonía!



"S" al aeropuerto

viernes, 27 de enero de 2017

Huacachina

Tras un plácido viaje de 12 horas, que pasé en su gran mayoría durmiendo, llegue a Ica.
Para viajes largos y sobre todo los nocturnos que están muy bien para ahorrar tiempo, son muy recomendables los autobuses cama, que son tan cómodos como business del avión, yo viajé con Cruz del Sur, pero hay otras compañías como Perú Bus, trans?  Que los tienen.

Nada más llegar a Ica compré mi billete para el día siguiente temprano y me subí a un moto taxi( previo regateo 5 soles) para que me llevase a Huacachina.

Huacachina es un oasis situado a 10 minutos de Ica( al parecer Ica no tiene nada salvo la estación de autobuses a la que llegar) y es interesante para ir al desierto y hacer sand boarding.
Tras encontrar mi hostel sin problema( Huacachina es bastante moridero y el pueblo entero son 3 calles) me fui a dar una vuelta.
Pero claro, es tan pequeño que en 10 minutos ya lo había recorrido entero…
Como ya había decidido pasar la noche y tenía alojamiento, nada que hacer, pero de haberlo sabido, habría pasado un rato y del tirón habría seguido a Lima.

En el paseo, compré el tour para el desierto,  que por 30 soles incluye paseo en buggies por las dunas de arena y sand boarding.
Hasta las 4:30 no salía, así que me fui a leer y a intentar sacar vuelos y consultar internet( aunque siguiendo la tónica general, pese a haber intrnet en todas partes, la conexión es pésima). Era el primer día que tenía un rato de descanso en todo el viaje, así que ni tan mal.


Oasis de Huacachina




A las 4:30 me subí a mi buggie con 2 coreanos y 2 suizos. El paseo consiste en un “ conductor suicida” que sube y baja las dunas como loco y te hace sentir como si estuvieras en el Dragon Khan de PortAventura, , por lo  que si no pretendeis vomitar, id con la digestión bien hecha.
Tras unas cuantas dunas hicimos sand boarding( en teoría surf en las dunas), pero para paquetillos como yo, más bien tumbarse en la tabla y que te empujen duna abajo mientras intentas frenar clavando los pies en la arena como puedes.

En Huacachina poco más había que hacer( ya dije que era un poco moridero), así que como me iba a las 5 a coger el bus para Lima, otra vez pronto a la cama como los Lunnies.


Buggies en las dunas




Oasis de Huacachina  visto desde las dunas 





Dunas de Hauacachina



jueves, 26 de enero de 2017

Cañón del Colca, me perdí las aptitudes físicas en el reparto de talentos


2:30 de la mañana y suena el despertador. Ducha rápida y a las 3 lista porque me pasan a recoger para ir al Cañón del Colca. Voy a hacer un trekking por la montaña durante un par de días y así explorar este precioso cañón que es el segundo más grande del mundo.
Me montan en un autobús turístico que me llevará con el resto del grupo con el que voy a realizar la caminata.
Tras un viaje de 4 horas y un par de paradas para ver el canón en su punto más alto( a casi 5000 m de altura) y el pueblito de Maca, llegamos al mirador del Cóndor.
El Colca es famoso principalmente por ser el hábitat natural del cóndor, y pese a que este mes no es época a avistamientos, el día que yo estuve sí que había un par, sin embargo, debido al ritmo latino- peruano del autobús en el que fui hasta el cañón, llegaba tardísimo al encuentro de mi grupo, con lo que no me dejaron ni asomarme al cañón, e ilusa de mi que me creí que lo iba a ver a la vuelta….


El cañón en su punto más alto, nevado





Así que tras  cambiar de medio de transporte por tercera vez un breve trayecto de 15 minutos llegué al punto de salida de mi trekking.
Me encontré un guía indignado, porque “ la española” ( osea yo) llegaba una hora tarde, pero yo qué le hago si era la primera que no entendía por qué no había viajado con el resto del grupo y no hacían más que cambiarme de bus como que fuera yo el comodín del público?
Total que nos explicó que ese día íbamos a caminar unos 18 km por el cañón, principalmente en descenso, hasta el punto más bajo, el oasis, donde haríamos noche, para al día siguiente por la mañana ascender 8 km desde una altura de 1111 m a 3287 hasta llegar a la cima del cañón.
Mirador del cóndor















Y aquí es donde viene la explicación del título del post, los que me conocen saben lo mucho que me gusta el deporte, sin embargo por mucho empeño que yo le ponga, como que mis aptitudes físicas brillan por su ausencia…
Como habíamos salido más tarde de lo programado, tocaba caminar rapidito para cumplir con el horario y entre lo pato que soy y el vértigo que me da la montaña podeis imaginar lo bien que se me dió el asunto….
Para rematar, se había caído el puente y tocaba pasarlo bien saltando entre las rocas, o bien metiéndose en el río cuya corriente pasaba bastante caudalosa y rapidita…
Si alguno de mis compañeros de wb crossfit me está leyendo, se acordará del numerito que monté para cruzar un triste riachuelo en un viaje que hicimos a Ávila…. Pues bien, eso no fue nada…. En el Colca sí que monté un espectáculo digno de vídeos de primera:
A saltar me negaba, porque estaba segura que me despeñaba en el intento, y para cruzar por el río, hizo falta una cadena humana de manos que me fueron pasando de uno a otro hasta que llegué a la otra orilla….Afortunadamente no hay documentos grâficos del momentazo jajjaaj.

Tras llegar al oasis y cenar( arroz para no variar) nos fuimos a la cama a las 8, es decir más pronto


que los lunnies. He de decir que hubiéramos sido capaces de irnos a dormir incluso antes, porque la caminata había sido muy dura y estábamos reventados del madrugón), pero teníamos mâs hambre que los pavos de Manolo y nos tocó esperar a las 7 que era cuando se servía la cena.



el río


























El oasis está por ahí al fondo





Después de dormir del tirón, a las 4:30 nos pusimos en marcha de nuevo. A esa hora por supuesto ni había amanecido, así que tocaba caminar como buenamente se podía ayudándome con la linterna del iphone, porque por supuesto a mi que mi mayor preocupación a la hora de preparar mi mochila, era lo fea que iba a estar todo el viaje, ni se me había pasado por la imaginación meter una linterna.

Comenzamos la ascensión todos juntitos pero una vez que amaneció, como soy más lenta que el caballi del malo, mi grupo me dió por perdida y me dijeron que me esperaban arriba, pero que no llegase más tarde de las 8 que era el desayuno o se iban sin mi jajaja.






Amanece en el Colca









Yo subí a mi ritmo, sin prisa pero sin pausa…hasta que tras hora y media me empezaron a dar unos 
horribles en el estómago.La gente pasaba y debía de darta ta pena que me ofrecían agua, hojas de coca y sorochipill( por si era mal de altura), ibuprofeno yen general todo lo que llevaban en sus botiquines…
Afortunadamente, pasóun grupo de chilenos que tenían buscapina y con eso y un poco de coca, que aquí se usa para todo, se me pasó un poco el cólico y conseguí llegar a la cima a tiempo para el desayuno.

He de decir que a punto estuve de desistir y montarme en uno de los taxis que pasaban( entiéndase por taxi mula de carga), pero ya que casi estaba arriba y ante la perspectiva de oler a choto o mejor dicho a mula, tocaba llegar arriba sí o sí.




El grupo en la cima






y cambiarme de bus un par de veces, porque con eso de que viajaba sola me usaban para ajustar todos los grupos… pusimos rumbo nuevamente a Arequipa.
El viaje se resume en dormir y más dormir( yo pensaba que estaba muy fit, pero ese trekking



 no dice lo mismo) y a una parada para comer.
Nos dejaron en el pueblo de Chivay para comer en un restaurante “ turístico”, pero yo que estoy en plan rebelde saltándome todas las recomendaciones de sanidad, me fui a buscar el mercado local con un italiano y 2 peruanos que había conocido en el bus.



Por 8 soles( previo regateo), nos pusimos como el kiko a base de pollo, rocoto( pimiento picante relleno de carne y verduras),arroz( que no falte)y torta de papas( la versión peruana de nuestra tortilla de patatas).

Después de comer y tras intentar durante 3 horas echarme la siesta sin éxito( el bus no era muy cómodo que dijéramos) a las 6 estábamos en Arequipa.
Tras dirigirme a Vallecito Backpackers, ducharme por fin con agua caliente y recoger mi mochilón ( cada vez que la cargo se me va haciendo más cuesta arriba, por eso ya empieza a ser mochilón), fui a la terminal de buses de Arequipa, donde a las 10 me esperaba un viaje nocturno de 12 horas a la ciudad de Ica, en bus cama eso sí.




Por fin llegué





Puesto de comida de DÑa JUanita en el mercado de Chivay





lunes, 23 de enero de 2017

Llegamos a Arequipa a las 4:30 y de ahí nos dirijimos al hostel Vallecito Backpackers que yo tenía reservado para dos días en Arequipa.
Esteban, el colombiano que había conocido en el lago Titikaka seguía hacia Huacachina en bus nocturno, pero decició acoplarse a mi plan y pasar el día en Arequipa, que pilla de camino a Huacachina.

La dueña del hostel, Silvia, es un verdadero encanto, pese a despertarla a esas intempestivas horas, nos dejó guardar el equipaje, arreglarnos y nos dió unos tips sobre lo que podíamos hacer.

Nuestra intención era hacer un walking free tourque nos habían recomendado y  que salía a las 10 de la mañana, cerca de la plaza de armas.
Tras hacer tiempo ( que yo aproveche para subir una entrada, ya que  sigo siendo una cateta tecnológica y me cuesta)y esperar a que “ pusieran las calles” y amaneciese, nos fuimos a desayunar.

Plaza de armas de Arequipa


Dimos unas vueltas y nos unimos al tour, que sale de la calle Santa Catalina 204.
He de decir que es bastante bueno tal y como me habían comentado y fue muy ameno.
Además de explicarnos aspectos arquitectónicos de la plaza de armas, la catedral, la Iglesia de los jesuítas y Santa Catalina, fuimos al mercado central, que es un compendio de puestos que vende desde carne y verduras hasta hierbas “ mágicas” y productos de lo más variopinto ( ver foto a modo de explicación gráfica). Allí probamos un riquísimo queso helado de “doña Rosa”y terminamos con una degustación de pisco sour.






Queso helado DÑa ROsa















Después del tour decidimos ir a una de las famosas picanterías a probar la comida típica. Nos decantamos por la “ Mundial” y pedimos el menú que consistía en chicharrón de cerdo( torrezno frito) rocoto( pimiento picante relleno de carne y cordero supuestamente… y digo supuestamente porque estaba de un color azul cianótico y tenía tal consistencia gelatinosa, que ni nos atrevimos a probarlo… yo me esperaba un rico lechazo como el de Valladolor, y claro, nada que ver…

Rematamos la comida con un chupito de anisado, bastante parecido a lo wue me tocaba beber cuando salía en Colombia…. No sé como podía


Si bien estaba bueno, he comido mucho mejor y más barato en puestos y mercados.
Ya nos dijo la guía que las picanterías era medio de lujo ( nos costó 50 soles, que al cambio son unos 15 euros), que si bien para mi es muy barato viniendo de España, en la mayoría de restaurantes populares y mercados, se encuentran menús riquísimos por 8 soles( 2, 3 euros). Eso sí no espereis restaurantes monos de esos a los que me lleva mi hermana, que muy bonitos y de moda( aunque te toca recenar al salir) porque suelen ser sitios bien feítos y en los que posiblemente en España no entraría…
Pero las condiciones higiénicas tienen que ser medio aceptables, porque he de decir que con todo lo “ temeraria” que estoy siendo y lo pupas que soy sigo sin haberme puesto ni un poco enferma….( toquemos madera).


Esteban se marchó  por la noche y yo me quedaba otro día más a descansa, pese a que Arequipa se ve de sobra en un día, estaba matada de los madrugones y luego me iba a hacer un trekking 2 días.


Mi segundo día en Arequipa fue de lo más tranquilo. Lo más reseñable fue enviar a mi hermana mis regalos peruanos. Como soy tan buena hermana( la mejor) le prometí que le iría enviando paquetitos con regalos de los países que iba visitando así que “ engañé” a Agustín un argentino que conocí en el hostel y a la aventura de enviar mis regalos que dedicamos la mañana.

Una caja, dos inspecciones del contenido y un rollo entero de cinta de embalaje después , conseguimos precintar mi paquete( más bien lo consiguió Agustín) y enviarlo rumbo a España, ya que llegue es otra historia….

Tras tan agotador trabajo, helado de queso de nuevo y chicharrón….Una buena carga de hidratos para el trekking que me esperaba….. Y menos mal no me quedo más en Arequipa, porque light lo que se dice light no es la cocina de aquí…







viernes, 20 de enero de 2017

Titikaka

Tras un viaje nocturno de 7 horas y media, a las 5:30 a.m llegué a Puno.
Se suponía que tenían que estar esperándome en la estación de bus, aunque allí no había nadie.
Tras hacer unas averiguaciones me enteré de que mi guia era el “lisensiado Álvaro”,que cansado de esperar porque mi bus se había demorado estaba en su oficina.
Tras deshacer y hacer la mochila un par de veces, para preparar una pequeña para los dos días que iba a estar fuera y dejar el resto en Puno, a las 7:30 salíamos hacia el muelle.
En el camino conocí a dos españoles, Carlos y Ana y a un colombiano, Esteban, que serían mis compañeros de viaje ese fin de semana.
Titikaka, situado a 4000 metros de altura, es  el lago navegable más alto del mundo,por lo que conviene ir después de Cuzco o Arequipa, tras estar aclimatados a la altura o con una maleta llena de Sorochipills y hojas de Coca.

Mi tour por el lago Titikaka iba a consistir en visitar las islas Uros, Amantaní y Taquile, haciendo noche en la segunda de ellas en un homestay ( variedad de alojamiento en la que te alojas con una familia indígena y convives con ella).
En primer lugar pusimos rumbo a una de las muchas islas Uros, situada a una hora y cuya particularidad reside en que son islas artificiales, construídas por las familias que en ellas residen con grandes cantidades de una planta que crece en el lago  llamada Totora. Las islas son por tanto, capas y capas superpuestas de esta planta, a la que cuando se moja o se pudre, se le añaden más capas por encima.
Tras estar un rato en la isla con la familia que en ella habitaba, conocer sus costumbres y cómo se formaban las islas, nos encaminamos a la isla de Amantaní.

Islas uros y embarcación tradicional




Niños de las islas Uros











El viaje duró unas dos horas y media, que aproveché fundamentalmente para dormir, ya que en el bus a Puno no había pegado ojo, porque con mi buen karma y mi amor por los niños, me tocó uno al lado, que no paró quieto en todo el viaje.
Al llegar al puerto, nos esperaban “nuestras familias” para llevarnos a sus casas.
Yo me alojaba con Carlos, Ana y Esteban en casa del capitán que nos había llevado a la isla,su esposa Vilma y sus dos niñas.
Tras una comida tradicional consistente en quinoa( que está “ hasta en la sopa” literalmente), unos pocos vegetales y queso nos fuimos a visitar la isla.

Selfie con Vilma y su familia


Subimos al templo de Pachamama( madre tierra), a 4190 me de altura y disfrutamos de las espectaculares vistas del lago Titikaka.

 Lago Titikaka desde el templo Pachamama










sentirnos como en el “ cole” porque llegamos tarde a cenar y Vilma nos mandara a nuestros cuartos, teníamos una fiesta.
A mi particularmente no me gustó, porque se trataba de una fiesta falsa , preparada para los turistas, en la que encima teníamos que ir vestidos por nuestras familias con los trajes típicos, que con todos mis respetos son de lo más antieróticos y si ya de mochilera se va medio fea, vestida de “ jotera peruana” ya ni te cuento.





Después de la fiesta que tampoco durò mucho, porque todos teníamos más sueño que una cesta de gatos, nos fuimos a dormir porque al día siguiente nos levantábamos a las 6:30. La verdad, no pegué ojo, porque me tocó otra vez un “ ronquiditos” y porque el cuarto era un congelador a pesar de las 4 mantas con las que dormí. Aún así pese a lo mucho que me cuesta levantarme para ir a trabajar, cuando viajo no me importa lo más mínimo no pegar ojo.

Tras desayunar ( yo no mucho, porque Perú no está preparado para la dieta gluten free) y despedirnos de Vilma, pusimos rumbo a Taquile.
Tras llegar tocaba “ escalar” nuevamente para llegar al pueblo, y si no estás acostumbrado a la altura,
notarás un poco que te ahogas. Nosotros que estábamos todos muy “ fit” subimos sin apenas problemas, pero en el camino íbamos recogiendo gente, a la que íbamos animando y ayudando a subir.

Taquile es bastante más feo que Amantaní, así que si encontráis tours para ir en un día a Uros y Amantaní, es suficiente, porque aunque yo me lo pasé genial en el homestay, fue gracias al grupazo 
que me tocó, porque a mi los tours para guiris no me gustan nada.

Después de comer salimos en barco hacia Puno. El viaje, de unas 3 horas, me dió para siestear, escribir un poco en el blog y hasta tomar el solecito en la cubierta.

Una vez en Puno y tras volver a ser personas después de  ducharnos en la estación ( como casi todo el mundo viaja de noche, la estación tiene duchas con agua caliente por 5 soles), me fui con Ana, Carlos y Esteban a conocer Puno, ya que nuestros buses a Cuzco( Ana y Carlos) y el de Esteban y mio a Arequipa no salían hasta las 10 de la noche y faltaban 5 horas.

Puno como que no tiene mucho que ver( mejor dicho nada) así que tras ver la Plaza de Armas de rigor ( así se conoce aquí a lo que sería la plaza Mayor), nos fuimos a comer, porque la verdad que en las islas pasamos más hambre que los pavos de Manolo.
Un pollo a la brasa y un par de Inkas colas después nos fuimos nuevamente a la terminal terrestre.

Tras coger nuestras mochilas y despedirnos cogí en bus nocturno de las 10:30 con Cruz del Sur a mi siguiente destino, la ciudad de Arequipa.

Cena en Puno











jueves, 19 de enero de 2017

Cusco, la ciudad que me atrapó

Tras hacer el check out en el hostel me dispuse a dar unas últimas vueltas por la bonita ciudad de Cusco.La noche anterior me había quedado en un hostel nuevo, el Grasshooper, que si bien es sencillo y básico te hace sentir como en casa porque su personal es encantador. Las chicas de recepción me hicieron sugerencias sobre que podía ver, ya que una vez visto Machu Picchu el resto lo dejo todo a la improvisación e iré viendo cosas de camino a Lima, donde cojo el vuelo a Los Ángeles el 22 de enero.
Finalmente decidí que iría a Puno para desde allí ver el lago Titikaka y sus islas.

En mi anterior parada en Cusco, vi que de la plaza de armas salían free walking tours y como ya había paseado por mi cuenta, decidí unirme al grupo de las 10:30 a ver si aprendía cositas interesantes de la ciudad. En total duró unas 3 horas,y además de contarnos datos históricos de la ciudad, degustamos Pisco, y vimos diferentes muestras de artesanía local.
La verdad que se me hizo un poco tostón, pero tras comer con algunos del grupo, decidí que me apetecía quedarme otro día más en Cuzco disfrutar de sus calles.

Catedral de Cuzco




Grupo del walking free tour


Por la tarde subí a las ruinas de Saqsaywamán, que al encontrarse en un alto a las afueras, ofrecen unas magníficas vistas de la ciudad. Para entrar, hace falta comprar el abono turístico que ya comenté en otro post, pero hay un truco del almendruco, y es que si vais a las 5:30 ya no hay nadie en taquilla y podeis pasar gratis, que es lo que me pasó a mi. Lo malo que al llegar arriba ya no me dejaron entrar, pero como yo solo quería disfrutar de las vistas me sirvió.
De ahí me dirigí al Cristo Blanco y esperé que se pusiera el sol para disfrutar de unas magníficas vistas nocturnas de la ciudad.

Cusco desde las  alturas




Ya de vuelta en el hostel conocí a unas malagueñas simpatiquísimas y quedamos para ver Cuzco al día siguiente, ya que el bus a Puno es nocturno y tenía todo el día para disfrutar.
A la mañana siguiente y tras hacer check out de nuevo nos fuimos a pasear y a comer, aunque más que pasear nos dedicamos a regatear en los puestos locales y a hacer algunas comprillas. Lo genial de viajar sola es que continuamente conoces gente, que suele ser muy afín a ti por lo general y es lo que me pasó con ellas.
Al final y tras unas copas de vino, en teoría de despedida, Isa, Laura, Alba y Jenny me convencieron para que no me fuese. Así que tras hacer nuevamente check-in en el hostel por cuarta vez, nos fuimos a disfrutar la noche cuzqueña.




Cheese and wine


Cusco tiene muchísimo ambiente mochilero y es una ciudad animadísima tanto de día como de noche. Nosotras fuimos a Mamá áfrica y disfrutamos de su happy hour de pisco sour( el coctail típico de Perú a base de pisco, limón y clara de huevo) hasta las 5.


A todo esto no he comentado que el día anterior cuando decidí quedarme más en Cuzco, también decidí retrasar mi vuelo para estar unos días más en Perú( con el billete de avión para dar la vuelta al mundo puedo hacer cambios de fecha las veces que quiera,ya hablaré en otro post de él).

A la mañana siguiente tras haber dormido un par de horas cambié mi billete Lima- Los Ángeles, aunque también me tocó retrasar el siguiente de L.A a Auckland.
El resto del día fue para comer con las malagueñas y pasear tranquilamente.

Por la noche tenía el bus nocturno a las 10 a la ciudad de Puno, que es la entrada al lago Titikaka. Ahí sí que solo se puede ir con tour y pensaba cogerlo según llegase a Puno a las 5:30, pero como los barcos salen a las 7 a.m, por si acaso lo compré en una de las millones de agencias de la Plaza de Armas de Cuzco. Me costó 125 soles a incluía el transporte a las islas, el guía, las comidas y el alojamiento una noche en la isla de Amantaní.

Tras comprar el tour y un pequeño drama peluqueril( solo a mi se me ocurre entrar a teñirme en una peluquería peruana, y si encima tienes tú que decirle qué mezclar a la peluquera, no pinta nada bien…), fui al hostel a por mi mochila.
Como ya había hecho check out 3 veces y nunca me iba, ya se reían de mi y me decían que si me guardaban cama para la siguiente noche, pero ya ése día definitivamente le dije adios a Cusco y puse rumbo al lago Titikaka.

Fiesta cusqueña









martes, 17 de enero de 2017

Machu PIcchu: un paseo por las nubes


3:45 de la mañana y suena la alarma. Estoy reventada porque no he pegado ojo, comparto habitación y el de la litera de arriba ronca como una locomotora… pero no se ve una de las siete maravillas del mundo todos los días , así que toca levantarse.
El motivo de semejante madrugón es que machu Picchu  abre a las 5 a.m y desde  Aguas Calientes a Machu hay que subir en autobuses que empiezan a circular a las 5:30 y parece ser que la gente hace cola mucho antes, para poder ser de los primeros y verlo sin multitudes.En temporada alta la cola comienza a las 2 de la mañana, pero afortunadamente ahora con llegar a las 5 es suficiente.
Tras coincidir con mi compañero de cuarto ronquiditos en el desayuno, nos vamos juntos a la parada del bus, menos mal ya había comprado los billetes la noche antes( valen 12 dólares oor viaje y la taquilla cuerra a las 9 p.m), porque para eso también hay una fila enorma ya.Conviene comprarlo todo por anticipado, ya que si ahora está así que es temporada baja, no quiero imaginarme en temporada alta.
Cola para el bus a las 5 a.m

Tras un breve trayecto en el que el paisaje comienza a darte una idea de la maravilla que espera llegamos a la puerta de entrada.
Como comenté hace un par de posts, compré la entrada Machu Picchu + montaña, lo que significa que además de visitar las ruinas tengo derecho a escalar la montaña para disfrutar de las vistas a unos 2500 escalones de altura.
He de aclarar que existe la posibilidad de subir 2 montañas, Wayna Picchu y Machu Picchu.La primera está a menor altitud pero es más complicada de subir y se compra en una entrada aparte.
Como yo soy una empanada ni sabía que había dos montañas. . Así que según entré me dirigí corriendo hacia WAyna PIchu porque me había apuntado al primer turno para subirla a las 7, pero tras esperar la cola me enteré que “mi montaña”era otra, con lo que cual rayo mcqueen me tocó correr en sentido contrario hacia la montaña Machu Picchu porque se pasaba mi hora de entrada.
Muerta del susto, porque tengo vértigo y aún recuerdo los numeritos que montaba. Cuando iba a esquiar y mis amigas me tenían que bajar de la pista en trenecito porque yo ni quería abajo, me dispongo a subir los 2500 escalones que me separan de la cima.
De todas formas, la chica de la entrada me ha dicho que se baja por el mismo camino, y que si lo veo mal que me de la vuelta.



Yo subo poco a poco sin mirar abajo y total mucho no se ve, porque hay una niebla que ni Niebladolid ( nombre cariñoso con el que mi amiga Silvia llama a Valladolid).Tengo un momento de crisis existencial todo hay que decirlo, en el que casi me doy la vuelta, porque los escalones son super 

estrechos y la verdad da miedito, pero tras parar un poco y respirar consigo llegar arriba , así que aquí estoy toda orgullosa de mi misma en la cima.
Tras coronar la cima del monte Machu Picchu

Pero la mala noticia es, que pese a que el guardaparques decía que iba a despejar, tras esperar media hora, apenas se vió nada, y ante la posibilidad de que lloviese, porque el cielo estaba más negro que un grillo, y que tuviesen que venir  a sacarme de allí en helicóptero, decidí bajar 
El promedio de subida son 2 horas y otra para bajar, yo tardé 1:45 de subida pero casi lo mismo en bajarla… y bueno  pese a no ver mucho, con eso me he ahorrado el gimnasio de toda la semana.


Niebla en la cumbre

Aunque  seguía sin verse nada, afortunadamente a la 1 y tras muchas horas allí se despejó y Machu Picchu me obsequió con unos selfies espectaculares para mi instagram, tras los cuales ya enfilé a la salida.
Para bajar decidí hacerlo caminando, porque tenía tiempo hasta la salida de m
El trayecto es de aproximadamente una hora y media y he de decir que es durillo, aunque subirlo es un buen calentamiento en caso de que vayais a subir las montañas Machu o Wayna Picchu.




MAchu Picchu despejado






Tras recoger mi mochila en el hostel me dirijo a la estación de tren y salimos de allí a las 16:30 rumbo a Cuzco de nuevo.Sobre las 6 estamos en la estación de Ollanta en la que al igual que a la ida, hay que coger un autobús para llegar a Cuzco. Según sales de la estación hay mini vans que por 10 soles te llevan a Cuzco y en cuanto se llena nos ponemos en marcha.A las 8 y poco estoy en Cuzco de nuevo y tras recoger mi mochila en el Kokopelli me voy cargándola a mi nuevo hostel, que si bien no es tán céntrico cuesta la mitad jajjaaja.
Esta vez comparto habitación con 2 japonesas, y son las dos primeras chicas que me encuentro viajando solas desde que empecé este viaje, algo que me ha resultado extraño en comparación con todas las que encuentras en Asia.

El día siguiente lo pasaré paseando tranquilamente por Cuzco que estoy reventada con tanto madrugón, así que mañana nos vemos de nuevo por aquí para contaros más cositas de este magnífico país que está resultando Cuzco.
Un besito y buenas noches